Después del final feliz de Twilight, y sabiendo que son cuatro películas, nos insertamos más profundamente en el personaje de Bella Swan, con todas sus contradicciones y el sufrimiento que ocasiona a dos hombres y a ella misma. Bueno, hombres es un decir, ya que uno de ellos es vampiro y el otro, hombre lobo... The Twilight Saga: New Moon se estrena el 20 de noviembre. Para más referencias, lee lo que dicen los críticos.
De Forks a Italia con luna nueva
Parecería que nada ha cambiado en el pueblo de Forks desde el final de
Twilight, la primera película. Bella Swan (Kristen Stewart) debería estar feliz porque ahora el vampiro Edward Cullen (Robert Pattinson) es su novio. Pero la pobre Bella parece no estar nunca feliz, siempre con la misma cara de nada... más aún cuando está a punto de cumplir años. O tal vez sea eso, el hecho de que empezará a envejecer mientras Edward se queda joven para siempre.
Quizás esa personalidad de Bella la predispone a emparejarse con individuos no precisamente humanos. Aquí reaparece en su vida su mejor amigo de la infancia: Jacob Black (Taylor Lautner), un indio americano. Edward y Jacob no pueden ni mirarse y la tensión entre ellos irá aumentando. Luego aparece la hermana de Edward, Alice (Ashley Greene), quien invita a Bella a celebrar su cumpleaños con la familia Cullen en pleno. Allí comienzan los problemas.
Al abrir uno de sus regalos, Bella se corta el dedo y provoca al novio de Alice, Jasper. Para protegerla, Edward la empuja contra la pared y le hace daño. Más adelante, el vampiro decide irse con su familia para siempre, también para protegerla, pero dejándola devastada, como queda él mismo, aunque con un ritmo lento vayan sucediéndose las secuencias demasiado rápido, paradójicamente. La impetuosa chica deambula por el bosque y es amenazada por los vampiros errantes.
Los cuatro compañeros de la tribu de Jacob la ayudan. Jacob se acerca más a su amiga y juntos comparten su pasión por las motocicletas, pero ella está abrumada por las constantes visiones de Edward, quien se le aparece cada vez que va a cometer una imprudencia. Jacob sufre la transformación que lo hace igual a sus amigos: ahora es un hombre lobo y lo peor es que está enamorado perdidamente. Y digo perdidamente, porque no tiene muchas probabilidades de éxito: ella no puede vivir sin Edward.
Mientras le rompe el corazón a Jacob y pone en peligro la tregua entre vampiros y hombres lobo, Bella viaja a Italia en busca de Edward a la corte de los Vulturi, entre quienes se destacan Aro (Michael Sheen) y Jane (Dakota Fanning). Me quedé con las ganas de ver más a estos vampiros reales: la secuencia de los Vulturi me resultó demasiado corta. Y el ritmo de la película bastante lento, pero ¿qué importa lo que yo piense? Millones de fans en todo el mundo están convencidos de que esta es la mejor película de la historia y ¿quién soy yo para contradecirlos? Dirigida por Chris Weitz y clasificada PG-13.
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