La teoría indica que factores como el estrés, la rutina y la alimentación influyen en el aumento del deseo sexual, durante las vacaciones la mayor parte de las personas cambian su rutina, se levantan más tarde, rompen la dieta y todo esto genera que estemos de mejor humor.
El relajarnos facilita el incremento del deseo sexual pero también interviene un factor a nuestro favor: el clima veraniego.¿Sabías que la hormona masculina por excelencia, la testosterona, trabaja mejor en verano?La naturaleza es muy sabia y contrario a lo que tradicionalmente se piensa de que la primavera es la estación del amor, la realidad es que esta categoría pertenece al verano, ya que la testosterona (la hormona masculina por excelencia que se encuentra en los testículos y responsable del desarrollo de los caracteres sexuales secundarios de los hombres) ha elegido el verano como su estación predilecta garantizando erecciones y un aumento en el deseo sexual.
Son muchas las hormonas que intervienen en la realización del acto sexual, la testosterona es una de ellas, esta hormona responde a los estímulos de la luz, lo que explica, entre otros factores, el aumento del deseo sexual en el periodo estival.
Pero eso no es todo, la serotonina y endorfina, hormonas responsables del placer e inhibidores del enojo y el sueño pueden aumentar por diversos motivos como la alimentación, el ejercicio físico y la luz (factores presentes durante el verano).
Para que te des una idea de la importancia de la serotonina y sus efectos, después de un orgasmo y de la eyaculación aumenta la cantidad de esta hormona en nuestro cerebro, es la responsable de esa indescriptible sensación de permanecer en la cuarta dimensión.
Pero como contrapartida podemos esperar el efecto inverso en las estaciones con menos luz como el otoño e invierno.
Otras beneficiadas de los rayos solares son las feromonas (sustancias químicas que produce nuestro cuerpo para resultar atractivos al sexo opuesto que se perciben a través del sentido del olfato), a ellas también les afecta positivamente el sol y el buen tiempo.
Dentro de los factores que incrementan la temperatura de la vida sexual en el verano podemos considerar el hecho de que el atractivo físico de las personas es mayor, la piel está bronceada y el tipo de ropa, por lo general, es más favorecedora, son prendas de vestir más ligeras e insinuantes con colores y diseños llamativos.
El descanso, la relajación y el buen tiempo hacen que nos sintamos mejor y nuestro sentido del humor mejore, lo que nos vuelve más sociables y divertidos.
Desde tu experiencia personal ¿Estás de acuerdo en que el verano es la estación del sexo?
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