ºººPlacer que asustaºººcasos reales...

Conocí un chico bello y sexy en un viaje que, como premio, nos dio la empresa donde laboramos. Mantuvimos contacto siempre por mail, ya que no vivimos en la misma ciudad, y así comenzó el flirteo: con mensajes hot y llamadas planificando nuestro encuentro pasional. Para apresurar las cosas, hasta le ofrecí ayuda-con un contacto que tengo- a tramitar la impresión de su pasaporte, el cual tuvo que venir a recoger a mi ciudad. Ese día nos fuimos a un motel y justo en medio de la faena, una vez que alcancé el orgasmo, me dio un fuerte calambre en la pierna derecha que me duró varios minutos. El pobre estaba asustado por mi reacción, mal por no poder lograr su orgasmo, y adolorido por lo que mi calambre generó en su miembro. Gracias a eso, hasta ahora no he sabido ya nada de él. ¡Desapareció!

No hay comentarios: