ºººKaty Perry Superstarººº

En la quiebra y a punto de darse por vencida, la glamorosa sirena casi deja que Hollywood le arrebatara lo mejor de ella. Pero después de un álbum exitoso, está determinada a adueñarse del lugar.

Katy Perry sabe hacer una entrada triunfal. En los MTV Europe Music Awards del año pasado, se apareció en el escenario con un uniforme de fútbol sentada ahorcajadas sobre un tubo gigante de bálsamo labial. En su última fiesta decumpleaños, llegó vestida como el icónico músico Freddie Mercury, incluyendo un llamativo bigote y una mala dentadura postiza. Y en su sesión de fotos con Cosmo, la belleza de 24 años les hace a todos un guiño y se dirige al estéreo y pone Bossy, de Lindsay Lohan.

Es una buena elección, porque no hay duda de que en estos momentos Katy está en total control. Lleva unos tacones de 12 cm de Emilio Pucci, pero se mueve y adopta las poses con tal rapidez, que la cámara apenas puede seguirla. Sin embargo, su camino a la fama fue más accidentado de lo que refleja su superglamorosa imagen. Le tomó ocho años de intentos fracasados anotarse un éxito millonario con el álbum One of the Boys.

"Me di hasta los 25 años para triunfar", dice Katy mientras come costillas a la parrilla después de las fotos. "Si no lo lograba, buscaría un buen marido". Bueno, no tuvo que usar el Plan B.

Un largo camino hacia la cima

Antes de que Katy grabara su disco, antes de que Madonna ayudara a impulsar su carrera hacia la estratosfera al declarar que Ur So Gay era su canción favorita en ese momento, antes de que I Kissed a Girl desatara una controversia y antes de que su éxito multiplatino y su gira con las entradas agotadas la llevaran a la portada de la edición HOT Cosmo, ya Katy había ganado (y perdido) tres contratos para grabar.

"En mi segunda compañía disquera me dijeron, a mí y a otras artistas, que iban a dejar fuera a algunas de nosotras", cuenta Katy. "Tenía entonces 19 años y fue devastador". Pero se armó de valor y trató de conocer personas que pudieran ayudarla. (Una de ellas fue Pérez Hilton, un temprano defensor y todavía un amigo).

"Fue agotador", recuerda Katy. "Ir a fiestas para codearme con famosos y actuar como si no me importara, cuando lo único que en realidad quería era alcanzar su mismo éxito".

Tocó fondo en el 2007. Después de meses de negociaciones, Capitol Records decidió no contratarla. "Se me hizo un nudo en la garganta, pero ni siquiera podía llorar", recuerda. "Pensé que no debía haber puesto tan alto mis esperanzas. Me quedé sentada en mi auto, que no había podido pagar en dos meses, pensando que no tenía dinero ni para el alquiler de mi casa".

Katy no había sido ajena a la adversidad. Abandonó la preparatoria a los 16 años (más adelante obtuvo su diploma) y se mudó de su casa en Santa Bárbara, California, a Los Angeles. Eso es complicado para cualquier adolescente, pero los padres de Katy eran pastores cristianos.

Ella empezó a separarse de la iglesia en la época en que decidió que el sexo no tenía que esperar hasta el matrimonio. "Pensaba que no sabía si podía cumplir esa promesa, porque el chico del campamento de verano era muy guapo", dice con una risita. "En mi casa no se hablaba de sexo, pero yo era una niña muy curiosa". Katy reconcilia su pasado con su presente, sin disculparse por ninguno de los dos. "Mi origen no me define", comenta. "Nunca tomé parte en las reglas y el odio que a veces acompaña a la religión. Pero si mis padres son felices con sus creencias, entonces yo soy feliz apartándome. Estamos de acuerdo en no estar de acuerdo".

Todo es parte de su encanto único. Canta temas escandalosos, como I Kissed a Girl, y no le preocupa mostrar su increíble cuerpo, pero en persona es una chica con los pies en la tierra.

Pero volvamos a Katy sentada en su auto. Su sueño se diluía, y no podía volver a casa rebosando de alegría. ¿Qué ocurrió? Sus padres pudieran llamarlo intervención divina. El director y CEO de Capitol cambió de idea (Katy piensa que algunas de las cantantes que contrató no dieron la talla), y un año después su álbum fue un hit. ¿Cuáles eran las posibilidades?

"Una en un millón", opina Kara DioGuardi, jueza de American Idol, coautora junto con Perry "una compositora en gran demanda" de dos canciones del último álbum de Kelly Clarkson. "Pero Katy tenía una gran confianza en sí misma y siguió insistiendo. Esta chica trabaja más duro que nadie. Y está enamorada de las cosas que hace".

Casada con la musica

Katy se ríe ante la idea de sentar cabeza pronto, pero aun así quisiera compartir con alguien su éxito. "Quiero a alguien a quien pueda contarle los detalles: que cené con Paul McCartney o que conocí a Madonna",dice. "Estoy viviendo una aventura extraordinaria, y si no tengo a nadie para hablar al final de la noche, me siento sola".

Durante dos años, mantuvo una relación de altas y bajas con Travis McCoy, vocalista del grupo Gym Class Heroes. Las bajas han sido duras. En diciembre pasado, él puso unas letras de canciones en el blog de su banda que obviamente se referían a Katy. Un ejemplo: "Soy el que dijiste que amarías toda la vida, pero sólo me has dado canas y peleas".

Los amigos suelen dar buenos consejos sobre las relaciones sentimentales, y su amigo Pérez dice: "Le he dicho a Katy que debía comprar unos buenos juguetes sexuales y evitar a los hombres un tiempo. ¡Pero no me escucha!"

En este momento, Katy está a punto de concluir una gira mundial superexitosa y disfruta del respeto de la industria de la música. (En los premios Grammy de este año, perdió el título de mejor cantante pop femenina ante su amiga Adele). Pero ella imagina un futuro diferente.

"Quisiera casarme en los próximos cinco años", dice con un suspiro. "Pero así como hago planes, también soy espontánea. Si encuentro al hombre perfecto, entonces, qué diablos... ¿por qué esperar?" Aun así, ella sabe que si titubea, su éxito duramente ganado puede escapársele con la misma rapidez con que llegó. "Sacrifico mi vida amorosa y mi vida social, pero esas cosas estarán allí en tres o cuatro años", anota. "Este es un momento importante en mi vida. No puedo ser sólo la chica que cantó I Kissed a Girl. Quiero dejar un legado".