Pierre Nkurunziza, presidente del país de África Oriental , promulgó una ley que criminaliza a las personas homosexuales, quienes en caso de ser sorprendidos, deberán de pasar por lo menos tres meses en prisiónEn la República de Burundi, una pequeña nación de 400 mil habitantes, ubicada en África Oriental, se ha tomado una decisión, que ha dividido a la nación. El pasado miércoles el presidente Pierre Nkurunziza, promulgó una ley que castiga la homosexualidad con cárcel, a pesar de haberse tomado esta controvertida decisión, no fue, sino hasta el pasado sábado que las organizaciones de derechos humanos se pronunciaron al respecto e invitaron a Nkurunziza a debatir su decisión:
"De acuerdo con el nuevo código penal, promulgado por el presidente Pierre Nkurunziza el 22 de abril, las prácticas sexuales entre personas del mismo sexo pasan a ser ilegales por primera vez en la historia de Burundi", señala el comunicado emitido; donde además se menciona que las personas que incumplan la presente imposición serán sancionadas con tres meses de cárcel, pudiendo ascender la pena hasta los dos años.
Sin embargo, contrario a lo pensado, esta no es una decisión tomada solamente por el líder burundés, sino que fue una iniciativa aprobada a mediados de marzo por la Asamblea Nacional. Además de esta nueva ley, el código penal burundiano sufrió otras modificaciones, como la abolición de la pena de muerte, además de introducir disposiciones de derecho internacional contra el genocidio, y la tortura.
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