ºººOrgasmo. ¿Qué, cómo,por qué?ººº

Es el remedio más efectivo contra el estrés, produce un pequeño trance, dura unos segundos y trae de cabeza a los científicos… Una encuesta afirma que 86 por ciento de los hombres disfruta más del sexo cuando el nivel intelectual de su compañera es inferior al de ellos. Otro sondeo asegura que las mujeres que se acuestan con hombres más inteligentes que ellas, alcanzan más fácilmente el orgasmo. Y una investigación reciente sugiere que es más difícil que una pareja alcance el orgasmo si tiene los pies fríos —lo que implica que el amor debería hacerse con calcetines.

¿Con cuál de esas tres aseveraciones se queda usted?

Cuando la gente es cuestionada sobre el orgasmo, se escucha de todo, pero no resulta lo mismo cuando se tratan de medir sus efectos en el cerebro, que es precisamente lo que hizo el investigador Gerst Holstege, de la Universidad de Groningen, en Holanda, quien llevó a cabo un estudio para escanear el cerebro durante el acto sexual.

“Lo más interesante que encontramos fue que durante el orgasmo todas las regiones del cerebro relacionadas con el miedo y la alerta se apagan, esto es algo que nunca habíamos imaginado.
“El orgasmo produce un trance que termina en un apagón momentáneo y total de una gran cantidad de neuronas”, explica Holstege.

“Y hay sutiles diferencias entre los orgasmos de ellos y ellas.
En las mujeres, el apagón es mucho más intenso que en los hombres”.

En el varón, el orgasmo suele coincidir con la eyaculación, pero se trata de una combinación que todavía no ha sido bien comprendida. Al parecer, no es el cerebro el que envía la señal de que el semen debe salir disparado por el pene.

Los expertos se inclinan por pensar que este mecanismo depende de un reflejo nervioso originado en la médula espinal, orquestado por un grupo de neuronas llamadas espinotalámicas, localizadas en la región lumbar.

En las ratas, cuando esas neuronas se estimulan, provocan eyaculaciones en casi 100 por cien de las veces.

Sin embargo, también es cierto que la voluntad consciente por parte del varón, es capaz de retrasar el clímax, por lo que el cerebro debe cumplir alguna función, antes de que se produzca el punto de “no retorno”. Pero si acaso existe un “centro del orgasmo” en el cerebro masculino, éste todavía no ha sido localizado.

En el hombre el orgasmo es breve, dura unos segundos, tras los cuales se necesita un periodo de recuperación para volver a empezar el ciclo (algunos hombres son capaces de sentir orgasmos sin que tenga lugar la eyaculación, los expertos les llaman “orgasmos secos”).

El primer asomo

El sexólogo estadounidense Alfred Kinsey, en su histórico estudio sobre el sexo, realizado en 1948, ofreció las primeras estadísticas confiables acerca de la longitud del pene y el orgasmo masculino. Por ejemplo, encontró que 75 por ciento de los varones alcanza el orgasmo dentro de los dos primeros minutos del acto sexual.

En lo que se refiere al pene, Kinsey reportó que la longitud de este órgano en reposo, puede ser muy variable; sin embargo, en erección, esta diversidad se reduce notablemente.

Una antigua hipótesis sugiere que un pene más grande es capaz de generar más placer y de permitir una mayor diversidad de posturas copulatorias, pero esto nunca ha podido ser comprabado (las investigaciones al respecto no permiten afirmar que un pene de mayor tamaño provoque más placer).

De acuerdo con Jared Diamond, profesor de la Universidad de California, en Berkeley, los orangutanes son capaces de dejar en ridículo al hombre en cuanto a posturas sexuales, con un miembro mucho más pequeño: el acto de los orangutanes puede durar hasta 15 minutos, en comparación con los cuatro minutos de promedio en los varones humanos.

Y al contrario del varón, el orgasmo en la mujer puede durar entre 20 segundos y dos minutos. Una diferencia sustancial contra los cinco segundos que dura él. Pero lo más significativo es que ella no necesita del orgasmo para producir un óvulo ni para tener sus hijos, mientras que en el hombre, el orgasmo es una estación obligada para que se produzca la eyaculación, y por tanto, indispensable para que fluyan los expermatozoides.

Hasta el siglo 19, la asunción general era que el orgasmo femenino era necesario para la concepción, pero hoy se sabe que esto no es cierto.

Si el orgasmo en las mujeres no tiene nada que ver con la concepción, ¿por qué ellas tienen orgasmos?

El orgasmo femenino es un misterio para el cual sólo existen respuestas parciales. Por ejemplo, en su famosa obra “El Mono Desnudo”, Desmond Morris sugería, en 1967, que el orgasmo tenía el propósito de inmovilizar a la mujer para mantenerla en posición horizontal tras el acto sexual, lo que permitía que no se escapase el semen y, por lo tanto, aumentaran las posibilidades de ser fecundada.

Y durante los años 90 del siglo pasado, los científicos Robert Baker y Mark Bellis, de la Universidad de Manchester, sugirieron que el orgasmo femenino permitía a la mujer atrapar mejor el semen debido a las repetidas contracciones musculares que provoca, un mecanismo que ayuda a retener el esperma en el útero.

Pero los estudios científicos recientes no han descubierto evidencias que relacionen la fertilidad de una mujer con su capacidad de sentir orgasmos.

Ellos se refieren al tema

Aquí las opiniones de algunos notables, sobre lo que para ellos es el orgasmo.

“Hay orgasmos universales, bestiales, suaves, profundos, angélicos, pornográficos, volcánicos, rabiosos, y chistosos… Pero, ¿para qué ponerle etiquetas?, el orgasmo no se puede definir con palabras”. (Adanowsky, músico)

“Es como quedarte suspendida en el tiempo y descubrir la belleza del Universo junto a la persona que amas”. (Ouka Leele, fotógrafa)

“El orgasmo es comparable a beber un vaso de agua fresca cuando tienes mucha sed”. (Mikel Urmenetea, dibujante)

“Lo mejor del orgasmo es esa relajación que viene después. Es como el ‘aaah’ que sigue a beber un vasito de agua fresca cuando uno tiene mucha sed. Me encanta el agua, pero más me gusta ese ‘aaah’ que le sigue”. (Pepa Charro, bailarina)

“Cuando ocurre un orgasmo lo humano se disuelve en lo animal, y lo animal en lo místico. El orgasmo es un sismo orgánico que corrige tu desincronización con el ritmo del Universo y te reintegra en el Cosmos”. (Hernán Migoya, cineasta y escritor)

“La primera vez que escuché que los franceses llaman al orgasmo la petite morte (la pequeña muerte) me sorprendió. Luego lo comprendí. No hay nada comparable a un orgasmo”. (José Corbacho, director de cine).