En el mundo del espectáculo no sólo los escándalos están a la orden del día. Aunque hay problemas que pueden solucionarse rápido y fácil, también hay otros que involucran a los famosos en una serie de problemas legales y demandas millonarias, de las que algunos salen bien librados, mientras que otros, con mucha menos suerte, han llegado incluso a perder su carrera.
Cuando los famosos son demandados, la primer duda que salta es: ¿cuánto pagarán los artistas por sus "errores"? Pues es bien sabido que varios de ellos poseen una gran fortuna, o al menos, un ostentoso estilo de vida.
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Sin embargo, no fue la única demanda que Michael tuvo que enfrentar. El artista fue demandado, tan sólo durante el 2009, por John Landis, director del videoclip de Thriller; por Ola Ray, la protagonista del mismo videoclip, que alegaba no haber recibido regalías por el tema y por su ex mánager Raymone Bain, quien le exigía $44 millones al cantante. Al momento de su muerte, las deudas de Jackson ascendían a $500 millones.
La top model Naomi Campbell es conocida por su belleza, pero también por sus arrebatos de ira contra sus empleados. Ya sea con un celular, un cepillo o sus propias manos, la modelo hace uso de lo que encuentra para desatar su furia contra aquellos que no la complacen. Por supuesto, esta costumbre le ha valido ya varias denuncias.
En junio de 2006, Ana Scolavino demandó a la modelo por agresión, ya que Naomi le arrojó su teléfono celular en la nuca al reclamarle sobre unos jeans que no podía encontrar. Campbell fue sentenciada a realizar trabajo comunitario por varios días, eso sí, glamurosa hasta el final.
En México, la reina de las demandas es Paulina Rubio. Su ex mánager, una fotógrafa y hasta la compañía que la representaba han interpuesto denuncias contra la cantante por varias razones: agresión, deudas, incumplimiento de contrato y difamación.
En 2006, Paulina golpeó a una fotógrafa con su bolso en el aeropuerto de Miami, pero el escándalo explotó hasta el 2008 cuando el video salió a la luz y con él una demanda millonaria por daños y perjuicios.
Para fortuna de la "chica dorada", sus abogados lograron llegar a un acuerdo con la demandante, y aunque nunca se dijo la cantidad, salvó a la cantante de ir a juicio.Las demandas de divorcio también están a la orden del día, pues en varias ocasiones parece más una venganza a nivel económico que la decisión madura de mantener vidas separadas.
Cuando Paul McCartney se separó de Heather Mills, la situación no iba a ser tan sencilla como firmar unos papeles, pues la cantidad que el cantante tuvo que pagar como acuerdo fue ni nada más ni nada menos que de $45 millones.
El caso de Cristian Castro fue bastante similar, pues aunque parecía que su matrimonio con Valeria Liberman era un completo sueño, el divorcio resultó ser toda una pesadilla. Liberman solicitaba una pensión de $25 mil mensuales para mantener a sus hijos y el estilo de vida al que Cristian los había acostumbrado, sin embargo, el juez dictaminó que era una cantidad exagerada y quedó en alrededor de $15 mil mensuales.
Una de las demandas más sonadas fue la que Melanie Brown, ex integrante de las Spice Girls, interpuso contra Eddie Murphy en agosto de 2007, pues según la cantante estaba esperando una hija del actor y éste se negaba a reconocerla.
Tras el nacimiento de la pequeña Angel Iris, al actor no le quedó de otra más que realizarse una prueba de ADN que probó que él era el padre de la niña.
El trabajo también es una de las grandes causas de demandas entre los famosos y Jennifer López tuvo que enfrentarse en junio de 2008 a una demanda por parte de una azafata que le exigía una indemnización de $5 millones por la mordida que un perro pastor alemán le dio durante un vuelo de Nueva York a Los Ángeles.
Al parecer, cuando el perro la mordió, la azafata sufrió una caída que le ocasionó varios problemas de salud. Incluso tuvo que ser operada de la espalda y perdió su trabajo, por lo que pidió a la cantante que resarciera todos los daños, pero aseguró que jamás recibió respuesta por parte de J.Lo.
Varias estrellas adolescentes también han tenido que afrontar problemas legales, pese a sus cortas carreras. Belinda fue demandada el año pasado por Marco Iván Ruiz, un ex bailarín que alegaba haber sido despedido injustificadamente, aunque dijo que no tenía nada en contra de la cantante.
Por su parte, Vanessa Hudgens también fue demandada por un ex empleado. Johnny Vieira aseguraba que fue contratado para manejar la carrera de la cantante, pero que fue despedido poco después de que Vanessa resultara elegida en el casting de High School Musical, por lo que pidió una indemnización de $27 millones.
En respuesta, Vanessa decidió contrademandarlo el mes pasado por usar su nombre, imagen y fotografías y por tratar de hacer negocios fingiendo que seguía siendo el mánager de la cantante.
Sin duda, el mundo de la farándula no sólo está lleno de glamour, fiestas y alfombras rojas, pues también está el otro lado de la moneda, en el que todos tratan de aprovecharse de cualquier situación que se les presente.
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