Microsoft Corp. acudió el lunes por primera vez en su historia a los mercados de deuda de largo plazo aprovechando su estelar calificación de crédito y el apetito de los inversionistas para recaudar US$3.750 millones.
El gigante de software vendió bonos a una tasa de interés levemente por encima de la deuda del gobierno estadounidense y muy por debajo de la conseguida por otras compañías.
La colocación desató la especulación de que la empresa podría destinar los fondos captados para realizar una gran adquisición que reanime su crecimiento. Fuentes al tanto, sin embargo, dijeron que, de momento, Microsoft no tiene un objetivo específico para el efectivo recaudado y que, más bien, aprovechó las favorables condiciones del mercado.
Los analistas predicen que Microsoft probablemente usará los fondos para seguir recomprando su acción, que ha descendido más de 35% en los últimos 12 meses.
La decisión es parte de un plan para acudir a los mercados de capital que fue aprobado el año pasado por la junta directiva. En un documento enviado el lunes a las autoridades bursátiles de Estados Unidos, Microsoft informó que planea usar el dinero captado para "propósitos corporativos generales", incluyendo la recompra de acciones y adquisiciones. Un portavoz de la empresa no quiso hacer comentarios adicionales al respecto.
La emisión de deuda constituye el indicio más reciente de que las grandes compañías están sacando provecho de la paulatina normalización de los mercados crediticios, incluyendo gigantes de tecnología con vastas reservas de efectivo. Cisco Systems Inc., por ejemplo, colocó en febrero US$4.000 millones en bonos.
Microsoft, que terminó marzo con más de US$25.000 millones en efectivo e inversiones, es una de las escasas empresas estadounidenses que cuentan con la codiciada calificación de crédito de triple A.
Mike Kastner, responsable de renta fija de Sterling Stamos Capital Management, dijo que Microsoft "es un nombre del mayor prestigio" y posee "muchas de las características que los inversionistas quieren ver en sus carteras".
Los fondos podrían reforzar la ya formidable artillería financiera de Microsoft para buscar una adquisición de peso en caso de que encuentre un blanco atractivo.
Aunque el presidente ejecutivo, Steve Ballmer, ha declarado que la empresa ya no está interesada en comprar la totalidad de Yahoo Inc., después de su frustrado intento por adquirir al gigante de Internet por casi US$45.000 millones el año pasado, Ballmer ha resaltado que todavía desea una sociedad con Yahoo en el negocio de los motores de búsqueda.
Bill Whyman, analista de ISI Group, indicó que Microsoft también podría destinar el dinero adicional para ayudar a financiar una adquisición en el mercado de software corporativo de una empresa como la alemana SAP AG. Leo Apotheker, el copresidente ejecutivo de SAP, prefirió no hacer comentarios sobre los rumores de que Microsoft podría estar captando fondos para adquirir la empresa.
Microsoft colocó bonos con vencimiento a 5, 10 y 30 años. El rendimiento de un bono a cinco años por US$2.000 millones quedó en 2,971% o 95 puntos base por encima del rendimiento comparable de los bonos del Tesoro de EE.UU., según una persona familiarizada con la emisión.
Esas tasas son muy inferiores a las requeridas por los inversionistas en una emisión de deuda promedio de una empresa con grado de inversión.
El spread (la diferencia entre el rendimiento del bono en cuestión y los bonos del Tesoro comparables) de la deuda de empresas con grado de inversión alcanzaba 444 puntos base el viernes, según los datos de Merrill Lynch. Para deuda de empresas con clasificación crediticia triple A, el spread llegaba a los 211 puntos base.
La colocación de Microsoft forma parte de un programa de deuda de US$6.000 millones que la junta directiva aprobó en septiembre. La compañía ya tiene casi US$2.000 millones en papel comercial, lo que le deja un margen de US$4.000 millones en deuda que podrían ser captados en el programa actual.
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