Aunque Armani afirmó que la causa de su malestar se debía a una hepatitis por intoxicación -la cual no es una enfermedad nada rara-, sabía que tenía que tomar sus precauciones, ya que ésta "requiere algún tiempo para recuperarse completamente", expresó el diseñador.
Sin embargo su multimillonaria casa de modas sigue trabajando normalmente, y más bien podría ser que las órdenes las mande desde su casa y no desde su oficina. "No ha habido ningún cambio en la delegación de mis autoridades a alguno de los ejecutivos, y todo en la compañía está trabajando con la misma energía".
Y es que a un mes de presentar su colección de hombres para Giorgio Armani y Emporio Armani -lo hará durante la Semana de la Moda de Milán- el famoso diseñador y amigo de los Beckham no puede bajar la guardia.
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